sábado, 22 de noviembre de 2008

Europa después de la muerte de Carlomagno


Europa después de la muerte de Carlomagno
Después de la muerte de Carlomagno sus sucesores fueron débiles e incapaces de regir con energía tan vasto imperio.
Ludovico Pío, hijo de Carlomagno, reinó cerca de treinta años (814 al 840); pero pronto después de su muerte se entablaron entre sus tres hijos luchas furibundas que se terminaron con la paz de Verdún (843), quedando el imperio dividido para siempre. Lotario, el hijo mayor, conservó el título de emperador del Sacro Romano Imperio, pero sólo fue rey de Italia y de una faja de territorio que comprendía el valle del Rhin y que se llamó Lotaringia; Carlos el Calvo reinó en Francia, y Ludovico, o Luis, el Germánico, en Alemania.


Esta división dio prácticamente lugar a la formación de los primeros grandes estados europeos en el seno de lo que continuó llamándose durante siglos Sacro Romano Imperio. Pero pronto éste se dividiría y fraccionaría todavía más, porque a la autoridad del emperador y de los reyes comenzó a contraponerse la de los grandes señores feudales, que acabaron por deponer al último e inepto rey carolingio Carlos el Gordo (887).